PARADIGMA FUNCIONALISTA

2. Características del funcionalismo

Los ideólogos del modelo funcionalista tomaron un enfoque sistemático de la sociedad.

El funcionalismo supone que los elementos de una determinada estructura social son interdependientes, es decir, que trabajan en conjunto para promover una estabilidad y para satisfacer las necesidades de cada parte. Se distinguen tres elementos o subsistemas en toda estructura social:

  • El cultural. Corresponde al conjunto de

normas, valores, lenguaje y símbolos compartidos.

  • El social. Corresponde a la manera en que se relacionan las personas y a la aceptación de las expectativas colectivas impuestas.

  • El de personalidad. Corresponde a las motivaciones y características de la población, en función a sus aspiraciones, metas y logros.

En 1950 Talcott Parsons propuso un análisis dinámico de los sistemas sociales con nuevos aportes para el funcionalismo, dando origen a la “teoría de la acción” para explicar la evolución social.

Parsons incorporó, entre otros, un cuarto subsistema en el enfoque funcionalista, el “orgánico”, que corresponde a la adaptación del individuo y de las estructuras para ajustarse o transformarse según el mundo externo.

A partir del aporte de Parsons, los ideólogos del modelo funcionalista tomaron un enfoque sistemático de la sociedad, entendiéndola como una entidad orgánica cuya estructura se sustenta en hechos que se reiteran de forma regular.