LOS ORÍGENES DE LA FILOSOFÍA

2. Parte 2

La historia de la filosofía empieza en Grecia. Los griegos constituían un pueblo que vivía en el Mediterráneo oriental, principalmente en las costas e islas del mar Egeo y del mar Jónico, aunque llegaron a establecer asentimientos en puntos tan distantes entre sí como el mar Negro, la costa mediterránea de España y el norte de África. Su civilización se extiende a lo largo de varios siglos, a través de los cuales se pueden diferenciar etapas, pero se conviene en que llega a su culminación en la Grecia continental, en el siglo V a.C., que recibe el nombre de “siglo de Pericles”.

Los griegos fueron un pueblo notablemente creador en muchos terrenos. Sus aportes en literatura, escultura y arquitectura, así como en ciencia y filosofía, y en la organización social y política, fueron decisivos en toda la civilización occidental posterior. Los griegos estaban en contacto con e incorporaron conocimientos de los pueblos del cercano oriente, como los egipcios y los babilonios, que habían producido descubrimientos matemáticos y astronómicos importantes.

Aunque cuando hizo falta supieron pelear, no se trató de un pueblo demasiado poderoso, ni conquistador militar. A pesar de que derrotaron a los persas en el siglo V, luego de haber sufrido gran cantidad de luchas internas, sucumbieron frente a Alejandro d Macedonia en el siglo IV y posteriormente ante el empuje de las legiones romanas, siglo II a.C. Pero vencidos militarmente, sedujeron a sus conquistadores culturalmente, imponiendo en buena medida su manera de entender el mundo y la vida humana.


Y aunque ellos fueron los primeros en empezar a filosofar, no lo hicieron de un día para otro; tampoco fueron los primeros en formularse preguntas filosóficas, sino que fueron los que iniciaron una consideración racional de esas preguntas, y con ello, fueron los griegos los que dieron nacimiento a la filosofía.