3. Muerte del niño y llegada de los gitanos

El jinete se acercaba

tocando el tambor del llano.

Dentro de la fragua el niño,

tiene los ojos cerrados.

En esta estrofa el Yo Lírico opone el exterior (el llano) y el interior (la fragua). En el exterior se acercan los gitanos: son muchos pero vienen unidos, juntos por eso dice “el jinete” y se siente desde la fragua el temblor del galope de los caballos.  Hay una metáfora: tocando el tambor del llano” es una metáfora auditiva que muestra el sonido del grupo que se acerca. Dentro, en la fragua, el niño ya ha muerto: “tiene los ojos cerrados”. En la primera parte la luna le había avisado: “te encontrarán sobre el yunque,con los ojillos cerrados”. Ahora ya no habla en futuro ni usa diminutivos: “tiene los ojos cerrados” lo que muestra la muerte del niño.

Por el olivar venían,

bronce y sueño, los gitanos.

Las cabezas levantadas

y los ojos entornados.

Los gitanos no lo saben aún y se acercan percibiendo un peligro. Vienen galopando por el olivar con las cabezas levantadas y los ojos entornados, están atentos, nerviosos quieren acercarse y saber qué ha pasado. El Yo lírico nombra a los gitanos con dos elementos: “bronce y sueño”; el bronce refiere a su trabajo y el sueño a la esperanza. También el Olivar como espacio es característica del pueblo gitano. Vienen todos juntos con la misma actitud. El yo lírico muestra siempre  a los gitanos como un grupo unido, como una unidad.