Comunicación Visual - 3º C.B.
ALGUNOS CONCEPTOS
GIUSEPPE ARCIMBOLDO
Giuseppe nació en 1530 en la ciudad
de Milán (Italia), en una familia de artistas, de origen alemán. Su padre trabajó como pintor en
la Catedral de Milán. Estudió
los grabados alemanes del último gótico y los dibujos de Leonardo da
Vinci.
Luego vivió en Praga al servicio del emperador Fernando I, es nombrado pintor de corte por Maximiliano II.
Gracias a su ingenio sobrepasó las funciones de su profesión y se embarcó en todo tipo de investigaciones, organización de eventos y consejos para el emperador referidos a artes e inventos.
A petición de la casa imperial, Arcimboldo realizó varias series de cuadros (variantes sobre un mismo tema) donde combinaba las cosas más diversas para configurar rostros y siluetas.
Arcimboldo gozó de merecida fama en su tiempo a partir de esos retratos grotescos (particularmente los de la serie Las cuatro estaciones) en los que el rostro quedaba constituído por los elementos más dispares. Es un arte caprichoso, ilusionista y minucioso y representa el gusto manierista por la curiosidad insólita y la paradoja.
Hasta el inicio del siglo XX la valoración y el estudio de sus obras no se realizaron con rigor: fueron los surrealistas quienes apreciaron una fascinante mezcla de sátira y alegoría en estas obras y concedieron un gran valor al juego visual que proponen sus composiciones.
Por este motivo podemos decir que Arcimboldo fue un artista de vanguardia surrealista.
Los surrealistas vieron en ellas una anticipación de sus juegos visuales e incorporaron sus técnicas a su propio vocabulario, imitándolas.
Su influencia llegó a pintores como Salvador Dalí.