PRIMERA SALIDA DE GREGORIO

1. Parte 1

Primera salida de Gregorio:

(Gregorio) deseaba abrir la puerta, dejarse ver, y hablar con el encargado; estaba ansioso por saber qué dirían al verlo quienes ahora tanto reclamaban su presencia. En caso de que se espantaran, Gregorio quedaría libre de responsabilidad y se sentiría aliviado. Pero si lo soportaban con paciencia, tampoco tendría por qué excitarse y de hecho podría estar a las ocho en la estación, si se daba prisa. Al principio resbalaba una y otra vez por la lisura del baúl, pero al fin, con un último impulso, logró mantenerse erguido. No hacía caso ya de los dolores del abdomen, aunque el escozor era enorme. Se dejó caer contra el respaldo de una silla cercana, a cuyos bordes se aferró fuertemente con sus patitas. Con ello recuperó el dominio de sí mismo y se mantuvo callado para escuchar al encargado.